10 abr 2011

El Coliseo, en manos de una empresa de zapatos

Berlusconi abre sus brazos a la privatización del Coliseo romano

Al ver los derroteros por los que va este mundo, una no sabe si reírse o llorar. Una de las noticias surrealistas de esta semana es que Berlusconi, el mafioso italiano número uno, ha vendido el Coliseo, símbolo de Roma y primera cosa en la que muchos piensan cuando le hablan del Imperio romano. No ha vendido el edificio, pero sí los derechos sobre el Coliseo, a cambio del dinero necesario (o mejor dicho, del dinero que ahora se estima necesario) para su restauración. Ahora la empresa en cuestión cobrará cada vez que se utilice una imagen del Coliseo, y además tendrá el derecho a organizar eventos en él (se me ponen los pelos de punta al imaginar a los ejecutivos de turno de fiesta en el anfiteatro Flavio). Este tipo de cosas solo pueden pasar en un mundo como el actual. ¿Irá también el dinero de las entradas al bolsillo del dueño de la empresa? Me dan arcadas solo de pensarlo. Ahora hasta la investigación, el ansia por saber y la cultura benefician al mercado. El sueño del sistema neoliberal. Y nadie dice nada, porque es más cómodo dejarse llevar por el sistema. Es un sistema perfectamente calculado: el Estado, controlado casi siempre por el mercado, pone el dinero para formar imbéciles sin espíritu crítico que dedican su vida a vegetar delante de la tele, a asentir y a comprar, recuperando así el mercado el dinero invertido.

¿No deberíamos indignarnos?

1 comentario: